
¿Running o Jogging?
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Existen todo tipo de corredores. No importa el nivel, ritmo o estilo: todos vamos tras un mismo objetivo, disfrutar del proceso y mejorar constantemente el rendimiento físico y mental.
El jogging es correr despacio; básicamente, es trotar sin compromiso ni objetivos específicos. Si eres principiante lo ideal es alternar caminatas con trotes, de esta manera podrás aumentar tu resistencia de forma gradual.
Lo más importante es escuchar a tu cuerpo y no forzarte. El jogging mejora la resistencia y la salud, es ideal y accesible para cualquier nivel ya que es un deporte de bajo impacto.
El running en cambio es la actividad de correr con objetivos claros, ya sea en distancia o en tiempo. Es un deporte de alto impacto debido a la exigencia física, por lo es que es importante contar con un entrenamiento especializado y adecuado para ti.
Este deporte contribuye a aumentar de la esperanza de vida, reducir el estrés y disminuir el riesgo de sufrir enfermedades tanto físicas como mentales.
Recomendaciones útiles:
- Alterna la distancia, la ruta y el ritmo constantemente, para que el cuerpo tenga la oportunidad de aumentar su resistencia.
- Date momentos para descansar durante tu entrenamiento.
- Controla el aumento de distancia de una semana a otra, evitando siempre los excesos.
- Aprender a modificar el ritmo para aumentar la resistencia. La velocidad debe incrementarse de forma medida y mantenerse constante en cada fase de la práctica.
- Realiza ejercicios de estiramiento después de cada sesión de running.
- Trabaja la musculatura al menos dos veces por semana, en sesiones de media hora, para que los músculos evolucionen al mismo nivel que el sistema cardiovascular.
Elegir entre running o jogging depende de tus necesidades. En ambos casos, puedes realizar el ejercicio en una caminadora, lo que te permite personalizar la inclinación y la velocidad, así como controlar el ritmo y la intensidad del entrenamiento.
Esto facilita mantener una velocidad constante, o practicar entrenamientos por intervalos. Además, es importante destacar que la cinta de la caminadora brinda cierto nivel de amortiguación que el suelo no, lo que puede ayudar a conservar la salud de los huesos y las articulaciones con el paso del tiempo.
¿Listo para empezar? Saber lo que quieres lograr es fundamental. Y ahora sí…¡Solo necesitas motivación y un buen calzado!